Estaba mi hermana tranquilamente atendiendo en su venta de pan, cuando pasan unos güercos en una camioneta y transitando a solo dos cuadras de la casa de mi hermana se encuentran con una camioneta de la policía y empiezan a intercambiar balazos, por supuesto mi hermana asustada entra corriendo a la casa, deja la estructura, el pan y todo afuera – al final eso vale poco, cuando estas en peligro – pero al momento de entrar detrás de ella viene un muchacho de aspecto pandillero hijo de una vecina, quien trataba de refugiarse, pero la reacción de mi hermana fue simplemente cerrar la puerta y no cederle el paso, mientras gritaba “tu no, tu no”, ja, ja, cuando nos contaba estábamos riendo de nervios y la reacción que tuvo, yo siempre he dicho que todos reaccionamos diferentes ante el peligro y las cosas lógicas, las hacemos ilógicas. En ese rato le llovieron comentarios que tal si el pobre cristiano quedaba muerto por una bala perdida, al final todo queda entre risas nerviosas y miedos escondidos.
Quiero que termine esta guerra sin sentido, quiero que todo vuelva al antes, al tiempo en el que podía salir sin ningún temor y el único miedo que tenia era encontrarme a algún ebrio detrás del volante, hoy los peligros se encuentran en cada esquina de esta triste ciudad.
Yo tambien quiero, si todos queremos porque no se acaba ¡?¿ saludos buen dia¡
ResponderEliminarYo quiero
ResponderEliminarTu quieres
Él quiere
Todos queremos, entonces no sé que pasa, tal vez sea que no lo queremos mucho.
si, la violencia antes uno la veia solamente en las peliculas de los hermanos Almada, jajajaja, tristemente ya esta en cualquier lado, espiandonos y tomandonos por sorpresa.
ResponderEliminarsaludos comadre....
Vaya que después del susto si que nos da risa, de buenas que no pasó a mayores y todo queda en una chusca anécdota si es que se le puede llamar así...Todos extrañamos eso de lo que hablas...recuerdo en alguna ocasión que llegué a ver el amanecer sentado en el kiosco de la macro plaza con un café del seven...Saludos
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