En negativo

Han sido días difíciles, te das cuenta que tus problemas son pequeñitos a comparación de otras personas que estimas y amas, el ir al hospital a estar con mi tía me ha cobrado un poco en la salud y anímicamente tampoco me sentía tan bien, pero me decía que era poco lo que podía aportar para apoyarlos, mi tiempo es limitado, la rutina semanal me devora la vida, disfruto el día a día, pero cuando la familia necesita de tu tiempo es cuando te das cuenta que quedas en saldo rojo con referencia a las horas que puedes aportar, si las pocas horas que tienes las usas en medio dormir o descansar, haces el esfuerzo y aun así me siento inútil por no poder dar mas de mi tiempo.

Este fin de semana me conmovía de mi miseria, siempre me siento tan dichosa de lo que tengo y lo que hago, pero cuando llegue a casa y me di cuenta que por un descuido me habían cortado el servicio de agua y ver mi saldo en números rojos ahora a nivel monetario, me dio un bajón de ánimos, acostumbrada a salir adelante sola, a no pedir nada, con pocas personas tengo la confianza de decir “préstame”, no lo se porque, simplemente estoy acostumbrada a no pedir, me tuve que morder un ovario y hablarle a mi madre, la cual sin problema me presto mas de lo que yo requería y se que en cuatro días se lo regreso, pero no me gusta pedir, tal vez mis traumas de hacerme la autosuficiente y decir que no necesito de nadie, cuando se muy bien que todos necesitamos de todos, tal vez mi trauma de no poder confiar, siempre he pensado que esto ya debería superarlo, desgraciadamente cuando abro la puerta y me permito confiar me dan una desconocida y todo por mis malas decisiones, total ese sábado me la pase entre conseguir dinero, pagar el servicio de agua, conseguir quien me reconectara el servicio y por fin poder bañarme, tal vez era lo único que me agradaba, moleste a mi familia abrazándolas y diciéndoles que no me había bañado, ja, ja, lo único positivo es que el peque no estaba ese día conmigo y no tuvo que ver a su madre con ojeras por preocupaciones tan superfluas como es el dinero, me di cuenta que mis problemas no eran tan grandes cuando me entero que mi tía entra de nuevo a diálisis y mi tío cae en un colapso nervioso, así que devuelta llevando a mi madre y a mi hermana al hospital, mientras yo seguía en mi peregrinar de conseguir tener la bendita agua tan necesaria para poder lavar, bañarme y limpiar la casa.

Hoy estoy aquí nuevamente dando gracias por la gente que me rodea, la regañada de mi cuñado que porque no le hable y le dije que necesitaba dinero, la llamada de mi otra hermana diciéndome que me iba a depositar si aun lo requería, se que cualquiera me tiende la mano, pero soy tan tonta y orgullosa que pocas veces alzo la voz para pedir ayuda.

Y hoy me sigo sintiendo pequeñita por no poder ayudar mas a mis tíos, mi hermana esta tomando las capacitaciones para poder realizar las diálisis a mi tía en casa, tengo un primo que dejó de trabajar para ir a cuidar a mi tío que esta delirando por causa de un colapso nervioso y hay que consultarlo al psiquiátrico y la tía en el hospital con la diálisis y ellos sin hijos que puedan ver por ellos, pero tienen muchos sobrinos que los queremos y estamos intentando apoyarlos de una u otra manera.

Y yo que me preocupaba por no poder pagar el agua, cuando hay miles de personas que en verdad tienen problemas que no son tan fáciles solucionar.