Recuerdo un tiempo en el que escuchaba leyendas urbanas, en que le sucedía algo al primo, de un vecino, del amigo de un tío, como siempre he sido una persona muy incrédula creía un tanto porciento y otro tanto lo dudaba, porque era común que quien te lo estuviera platicando tendiera un poco a exagerar las cosas, pero últimamente la situación sigue estando cada vez mas desquiciante, caótica, algunas veces observo el mundo y pienso que tal vez mi visión esta nublada, tal vez solo sea un cuadro surrealista al cual no le encuentro el significado.
Ayer fui por mi peque a casa de su padre, recibo la llamada de mi hermana que si podía pasar por ella, como me encontraba cerca de ahí a unos 10 minutos no le vi problema alguno y le confirme que pasaba por ella mas tarde, iba manejando por la Av. Ruiz Cortines, al recibir su llamada me regreso del camino a casa, entro por una pequeña avenida que me conecta del municipio de Guadalupe al municipio de San Nicolás, por ser pequeña existe un tramo que es de un solo carril, con bastante visibilidad veo un auto que viene en contra, "hecho la mocha" – vaya para que me entiendan mega super hiper rápido, tenia dos opciones hacerme la occisa y que el wey se aplacara y se volviera a meter a su carril, pero como soy persona tranquila y angelical, dije pobre mortal cuanta prisa ha de tener, posiblemente traiga diarrea y yo poniéndole trabas para que rebase, así que me orille un poco a la derecha para que muy apenas, justo, apenitas, por un pelito, lograra rebasar y casi golpea mi espejo lateral, traigo los lentes para sol puestos, veo a mi izquierda, quise ver al wey, quise ver la cara del baboso que por poco me choca de frente, cuando veo al ocupante del asiento trasero, con un arma larga, lo primero que hice fue girar mi vista para ver el panorama y no ser presa de un fuego cruzado, pensé en mi peque en el asiento trasero, pensé en mi Dios, empiezo a decir en voz alta, “Ay Dios mío, Ay Dios mío” como seria mi plegaria que mi peque me pregunta que qué pasaba y le digo que vi a unos hombres armados y me dice el pequeño, lo bueno mami es que yo venia agachado… es triste que estas cosas un niño tenga que vivirlas, en su inocencia para el todo es un juego, algo que no entiende, no ha visto y no deseo que vea, sin embargo la realidad se encuentra afuera, al cruzar la puerta, en la esquina de la casa.
Mundo hediondo, sigo diciendo me encanta mi planeta tierra, lo único que odio es a todos los miserables mala vibra que habitan en ella.
Ayer fui por mi peque a casa de su padre, recibo la llamada de mi hermana que si podía pasar por ella, como me encontraba cerca de ahí a unos 10 minutos no le vi problema alguno y le confirme que pasaba por ella mas tarde, iba manejando por la Av. Ruiz Cortines, al recibir su llamada me regreso del camino a casa, entro por una pequeña avenida que me conecta del municipio de Guadalupe al municipio de San Nicolás, por ser pequeña existe un tramo que es de un solo carril, con bastante visibilidad veo un auto que viene en contra, "hecho la mocha" – vaya para que me entiendan mega super hiper rápido, tenia dos opciones hacerme la occisa y que el wey se aplacara y se volviera a meter a su carril, pero como soy persona tranquila y angelical, dije pobre mortal cuanta prisa ha de tener, posiblemente traiga diarrea y yo poniéndole trabas para que rebase, así que me orille un poco a la derecha para que muy apenas, justo, apenitas, por un pelito, lograra rebasar y casi golpea mi espejo lateral, traigo los lentes para sol puestos, veo a mi izquierda, quise ver al wey, quise ver la cara del baboso que por poco me choca de frente, cuando veo al ocupante del asiento trasero, con un arma larga, lo primero que hice fue girar mi vista para ver el panorama y no ser presa de un fuego cruzado, pensé en mi peque en el asiento trasero, pensé en mi Dios, empiezo a decir en voz alta, “Ay Dios mío, Ay Dios mío” como seria mi plegaria que mi peque me pregunta que qué pasaba y le digo que vi a unos hombres armados y me dice el pequeño, lo bueno mami es que yo venia agachado… es triste que estas cosas un niño tenga que vivirlas, en su inocencia para el todo es un juego, algo que no entiende, no ha visto y no deseo que vea, sin embargo la realidad se encuentra afuera, al cruzar la puerta, en la esquina de la casa.
Mundo hediondo, sigo diciendo me encanta mi planeta tierra, lo único que odio es a todos los miserables mala vibra que habitan en ella.
No tengo mas palabras, no quiero vivir asi, no quiero que mi hija crezca asi nadie queremos.
ResponderEliminarEs un susto tremendo lo se, no me lo vas a creer, pero todos los dias al salir, rezo por nosotros y por todos aquellos que salen a trabajar a sus escuelas y que nada deben creo que es lo unico que puedo hacer. Un abrazo.
Comadre:
ResponderEliminarEs horrible lo que nuestro Amado Pais esta viviendo, lo que nuestr@s hij@s tienen que vivir, y no hay nadie que se atreva a poner un alto, definitivamente con marchas silenciosas no se soluciona nada.
Cuidense.
Besos.
Me quedé impactada, nos enteramos por noticias, pero ya contado por alguien que lo vive, es otra cosa.
ResponderEliminarUn abrazo. Feliz Dia de las Madres!!
Una cosa que me hace pensar, el en cinco de Mayo se supones que Mexico le dio en la torre al ejercito mas poderoso que habia en ese entonces, porque no podemos hacer lo mismo ahora en contra de los pen........jos carteles?
ResponderEliminarPOS NO QUE MUY GALLONA?
ResponderEliminarCINCO DE MAYO? JA JA APOCO TE LA CREISTE QUE MEXICO GANO LA GUERRA ESE DIA, ATOLE CON EL DEDO ESO ES LO QUE NOS HAN DADO.