De esos momentos en que te das cuenta que tu niño pronto será un adolescente, en que la ropa parece que se ha encogido, empequeñecido de tal manera en que el moustro de Frankestein se ve mejor vestido.
- Veo que traes el short nuevo del uniforme, no te parece demasiado grande
- No mami, esta muy bien, hoy tuve clases de educación fisica y pude hacer todos los ejercicios bien, mira! (Me demuestra con echos sus palabras, haciendo una sentadilla)
- Pues espero y no se te rompa como el otro que rompiste hace unos días
- No mami, me subi a un arbol y no pasó nada, ves no se me ha roto.
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